Una iniciativa innovadora es el “Modelo de Evaluación de Condiciones para la Parentalidad (MECeP)”, un modelo creado por académicas del Departamento de Trabajo Social de la UC Temuco, en conjunto con Fundación La Frontera, el cual cambia el paradigma de cómo se evalúan las “habilidades parentales” en los programas de la línea de protección de infancia de SENAME, poniendo a disposición un modelo de evaluación flexible, que toma en cuenta el contexto sociocultural y las condiciones en que a los padres les toca ser padres, superando la mirada castigadora y de sospecha que ha prevalecido hasta ahora, abriendo así nuevas posibilidades a los procesos de intervención con los niños y sus familias.
SENAME, en su área de protección a la infancia, trabaja con distintos tipos de programas de acuerdo a los niveles de complejidad que afectan al niño, en su mayoría ambulatorios, ejecutados por diversos organismos que licitan estos programas. Dentro del trabajo que realizan estas instituciones, está evaluar y enviar a los tribunales de familia informes sobre las “habilidades parentales” de los progenitores de los niños que están insertos en aquellos programas; y es ahí, en ese sistema de evaluación, dónde las académicas e investigadoras de la UC Temuco detectaron la necesidad de crear un nuevo modelo de evaluación que esté acorde a la realidad regional y del país.
La implementación del Modelo
Entre los años 2012-2014, el equipo liderado por la investigadora Dra. Magaly Cabrolié y co-dirigido por la académica Lilian Sanhueza, desarrolló el proyecto FONDEF-IDeA, que tuvo como resultado el MECeP teniendo una gran recepción por la comunidad académica vinculada a temáticas de infancia y familia y, sobre todo, por SENAME a nivel nacional, que durante el año 2015 incorporó dentro de sus orientaciones técnicas para algunos programas de la línea de protección de derechos, la sugerencia de trabajar con el Modelo de Evaluación de Condiciones para la Parentalidad MECeP.
“El modelo se probó en experiencias piloto con programas de Fundación La Frontera, vimos qué sí funcionaba, qué no, qué había que adaptar, mejorar y se incorporaron las particularidades de la región como la interculturalidad, las relaciones interétnicas, las creencias, cómo se entienden las familias, etc. Una vez piloteado el modelo y hecha las modificaciones, establecimos que teníamos en nuestras manos un modelo que permite evaluar las condiciones para la parentalidad y un protocolo con instrumentos adecuados para recoger y organizar la información que se genera en el proceso de evaluación, para después cerrar con un informe que vaya al tribunal de familia, de carácter analítico y no solo descriptivo”. Señaló la Dra. Magaly Cabrolié.
La directora del proyecto agregó que “la adjudicación de este nuevo FONDEF Tecnológico 2016-2018, nos va a permitir ver cómo funciona el modelo fuera de la región, trabajando en las regiones de Valparaíso, Metropolitana, Bio-Bio y Araucanía, que son las regiones donde se concentra la mayor cantidad de programas de SENAME, ya que un componente principal del modelo es su flexibilidad y adaptabilidad de aplicación en diversos contextos”.
Lo interesante a destacar es que el modelo tiene también una proyección internacional y así, como se va a probar en 4 regiones del país, se va a probar en Uruguay, donde la idea es poder generar con académicos del Departamento de Trabajo Social de la Universidad de la República una especie de “equipo espejo”, que junto con Aldeas Infantiles de Uruguay puedan ir replicando el enfoque y modelo que se ha venido trabajando, incorporando sus propias características socioculturales. Para esta experiencia se contará también con el apoyo del INAU (Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay), institución equivalente a SENAME.
Periodista: Macarena Maturana M.
Fotografía: Jorge Zúñiga V.
Dirección de Comunicación y Marketing
Vicerrectoría de Extensión y Relaciones Internacionales