Aida Baldini, profesional del área de sanidad forestal de CONAF entregó esta preocupante cifra en actividad desarrollada en la UC Temuco.
En el marco del desarrollo del Taller “Nuevos desafíos en la Gestión de Recursos Naturales” organizado por el Núcleo de Estudios Ambientales y el Magíster en Recursos Naturales de la Facultad de Recursos Naturales de la UC Temuco, la ingeniera forestal del área de sanidad forestal de CONAF, Aida Baldini, compartió estremecedores datos que indican que el 100% de las araucarias araucanas existentes entre la región del Bío Bío y La Araucanía están infectadas en algún grado por un agente, al parecer fúngico, aún desconocido por el equipo científico a cargo de la situación.
Baldini expresó que “ésto está afectando a araucarias de todas las edades. En general es una enfermedad que no se nota a primera vista. Se ha descartado la poda natural porque la araucaria tiene un crecimiento muy lento, por lo tanto, a modo de cálculo, un verticilo podría morir cada 30 años, pero resulta que aquí encontramos 3,4 hasta 5 verticilos muriendo al mismo tiempo. En árboles adultos, tenemos una mortalidad que no es más de un 1.5% pero el problema lo tenemos en la regeneración, estamos con un 7% de mortalidad en regeneración”, explica la experta.
“Hicimos una prospección sobre toda la distribución natural de la araucaria que abarca 320 mil hectáreas en el país que va desde Ralco en la octava región hasta el sector norte de Panguipulli y tenemos las cifras. Toda la distribución de la araucaria está afectada en algún grado, las 320 mil hectáreas cuentan con algún grado de infección. Pese a lo terrible, ha sido muy satisfactorio ver cómo toda la comunidad científica, sector privado, sector público, académicos y estudiantes están totalmente unidos trabajando para solucionar muy rápido el problema”, dice la experta de CONAF.
Consultada sobre cómo revertir este desolador escenario, Baldini comenta que “ésto es reversible, si es un hongo, existen muchos productos amigables con el medioambiente que sí podemos aplicar en bosque nativo sin alterar ni flora ni fauna”, concluye.
Cabe señalar que CONAF ya lleva cerca de 1 año y medio trabajando con expertos e investigadores de connotación mundial tanto nacionales como internacionales logrando llegar a una línea que marcaría una tendencia a hacia un agente fúngico, aunque todavía no se aisla. Comenta Baldini que “hemos aislado cientos de hongos pero mientras no tengamos estudios acabados no tenemos ninguna posibilidad de determinar el agente causal”.
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